Es muy común oir en boca de los adultos la expresión de que los jóvenes son el futuro o de que el futuro está en manos de los jóvenes, como si ellos no tuvieran nada que ver en el futuro.
Es más fácil para ellos cargarnos con esa responsabilidad a los jóvenes.
¿No saben las personas adultas que el futuro se construye actuando ahora en el presente?
Los adultos que dicen esto todavía tienen la edad suficiente para hacer cosas que pueden cambiar el mundo en el futuro.
Las personas mayores no pueden plantarse y pensar que el futuro está solo en las manos de los jóvenes, porque se equivocan, ya que ellos deben también participar en la creación del futuro. Incluso creo que el futuro de momento está más en manos de los adultos que de los jóvenes debido a que nosotros no tenemos las ideas del todo claras y nos falta madurez y experiencia.
Hay de dar a entender a todo el mundo que el futuro está en manos de todos y todos debemos aportar lo que nuestra experiencia nos permite: los adultos con su madurez y los jóvenes con nuestra ilusión y ganas de hacer.
